¡Bienvenidos a Paulina Cocina! En esta ocasión vamos a contarles todo sobre unas galletitas redondas, gorditas, bien chocolatosas, y con un relleno cremoso…Seguro están pensando en alfajores, pero no: son whoopies, una delicia de la repostería americana que cada vez gana más fans en Argentina.
En esta nota vamos a meternos hasta el fondo del horno para contarles qué son exactamente los whoopies, cómo hacerlos bien esponjosos, cuál es el relleno tradicional (y las mejores alternativas), cómo conservarlos, y la diferencia con nuestros amados alfajores.
Además, les dejamos una receta de whoopies caseros, fácil y rendidora, y un bonus track: ¡5 rellenos para todos los gustos con yapa incluida! ¿Listos para batir, hornear y disfrutar? ¡Vamos!
Tabla de Contenidos
Sobre los Whoopies
Los whoopies son como un híbrido entre unas galletitas dulces, unas mini tortas o unos alfajores. Pero no se confundan, porque aunque tengan forma de galletas rellenas o parezcan un sándwich de bizcocho, en realidad son algo único.
Su textura es blanda, tipo bizcochito esponjoso, y su forma redonda y generosa los convierte en el postre ideal para compartir… o no. Porque vamos a decir la verdad: uno dice “me como uno solo” y termina escondido atrás de la heladera con el tercero en la mano.
La versión más popular y buscada es la de whoopies de chocolate con relleno de marshmallow fluff o crema de malvaviscos: una crema dulce, suave y aireada, con textura de nube batida, que se hace a base de azúcar, claras de huevo y jarabe de maíz. Pero no se preocupen que se pueden hacer con distintos tipos de relleno.
Historia y origen de los whoopies: Una expresión de alegría
Aunque hay cierta disputa por su origen (como pasa con todo lo rico), los whoopie pies son típicos de la zona de Nueva Inglaterra en Estados Unidos, sobre todo de Maine y Pensilvania.
Algunos dicen que fueron creados por las comunidades Amish, donde las mujeres horneaban estos dulces y los ponían en las viandas de sus maridos. Al abrirlas, los maridos gritaban “Whoopie!”, que vendría a ser algo así como “¡Vamos todavía, hay postre!” en versión granjera.
Más allá de la leyenda, lo cierto es que este postre casero fue ganando fama en ferias, cafeterías y libros de cocina, hasta volverse un clásico de la repostería americana. Y ahora, por suerte, también llegó a nuestras cocinas.
Características de los whoopies que hay que conocer
- Esponjosidad total: la masa de los whoopies no es crocante como una cookie. Es aireada y húmeda, parecida a una torta liviana.
- Forma redonda y generosa: se hacen en porciones individuales, del tamaño de la palma, aunque hay mini y maxi versiones.
- Cacao amargo en polvo: la versión tradicional lleva un buen cacao, que le da ese sabor intenso sin ser empalagoso.
- Relleno dulce y cremoso: ya sea con buttercream, marshmallow fluff o algún invento casero, el relleno es fundamental.
- Fáciles de hacer: Los whoopies, a diferencia de los macarons no llevan batido de claras, ni levaduras raras, ni moldes especiales. Con una cuchara y ganas, alcanza.
- Infinitas combinaciones: además de los clásicos whoopies de chocolate, se pueden hacer de vainilla, red velvet, calabaza y más.
- Diferentes al alfajor: son parecidos, pero no iguales. Los whoopies se sienten más aireados y elásticos, mientras que el alfajor es más compacto y con otra miga.
5 Cosas que tenés que saber de los whoopies
- El relleno tradicional de los whoopies es la crema de malvaviscos (ese fluff blanco tipo nube), aunque también se usa mucho la buttercream o crema de manteca sabor vainilla.
- Para que las tapas queden suaves y esponjosas, hay que batir bien la manteca con el azúcar, no sobrebatir la harina, y ¡no pasarse de horno!
- Se pueden hacer whoopies de chocolate, pero también de vainilla, calabaza especiada, red velvet… lo que se les ocurra.
- Los whoopies pies receta son una mezcla de galletitas y bizcochitos. Técnicamente son bizcochitos, pero con look de galletita. Un Frankenstein adorable.
- Se pueden congelar perfectamente, envueltos en papel aluminio y en un recipiente hermético. Duran hasta 2 meses. Se descongelan en heladera o temperatura ambiente.
5 ideas de relleno para whoopies (+ 1 yapa)
Porque no todo el mundo tiene un frasco de crema de malvaviscos en la alacena, y porque en Argentina amamos improvisar con lo que hay, acá van 5 rellenos para whoopies pies receta que funcionan bárbaro:
- Buttercream de vainilla: El clásico que nunca falla. Se hace batiendo manteca pomada con azúcar impalpable y un chorrito de esencia de vainilla. Cremoso, suave y con ese gustito a infancia.
- Dulce de leche repostero: Sí, ¡es legal argentinizar los whoopies! Y con dulce de leche quedan tremendos. Elegir uno firme, tipo repostero, para que no se desarme la estructura.
- Ganache de chocolate: ¡El más buscado! Se calienta la crema de leche y se vuelca sobre el chocolate picado. Luego se deja enfriar y se usa como relleno seductor.
- Crema de manteca con cacao: Una buttercream sabor chocolate: igual que la de vainilla, pero con un toque de cacao amargo. Va genial con las tapas de vainilla o red velvet.
- Crema de queso (tipo frosting de carrot cake): se bate queso crema con azúcar impalpable y un poco de manteca. Es fresca, menos empalagosa y muy popular en versiones como calabaza o red velvet.
Yapa: Marshmallow fluff alternativo: Se puede hacer un merengue italiano firme con almíbar caliente y claras batidas. No es exactamente lo mismo, pero da ese efecto “nube dulce” que tanto gusta.
Tips finales para preparar whoopies caseros
- Usar cacao amargo en polvo de buena calidad para el sabor clásico.
- Batir bien la manteca con el azúcar para que la masa quede liviana.
- No sobrebatir una vez que se agrega la harina. Mezclar lo justo y necesario.
- Usar manga o cuchara para porcionar la masa. Que queden parejitos.
- Dejar espacio entre los whoopies al hornear porque crecen.
- Enfriar bien antes de rellenar. Si no, se derrite todo y lloramos.
- Guardar en recipiente hermético. Duran 3-4 días a temperatura ambiente.
- Probar con distintos rellenos para whoopies: dulce de leche, crema de maní, ganache, ¡lo que quieran!
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Receta de whoopies de chocolate
Rinde: 10 whoopies caseros grandes (o 20 tapas)
Tiempo de preparación: 45 minutos
Ingredientes
Para las tapas (whoopies de chocolate):
- 100 g de manteca (a temperatura ambiente)
- 150 g de azúcar
- 1 huevo
- 1 cdita. de esencia de vainilla
- 200 g de harina 0000
- 50 g de cacao amargo en polvo
- 1 cdita. de bicarbonato de sodio
- 1/2 cdita. de sal
- 125 ml de leche
Para el relleno de ganache de chocolate:
- 150g de chocolate semiamargo (ideal 60-70% cacao)
- 100 ml de crema de leche
20g de manteca (opcional, para darle más brillo y suavidad)
Cómo hacer whoopies pies receta paso a paso
- En un bol, batir la manteca con el azúcar hasta que esté cremosa y pálida. Sumar el huevo y la vainilla. Integrar bien.
- Tamizar la harina, el cacao amargo en polvo, el bicarbonato y la sal. Incorporar todo a la mezcla anterior en dos tandas mezclando suavemente con una espátula o batidor de mano, alternando con la leche. Mezclar lo justo y necesario hasta obtener una masa espesa pero blanda.
- Con una cuchara o manga, formar montoncitos de unos 4-5 cm de diámetro sobre una placa cubierta con papel manteca. Dejar espacio entre ellos porque crecen.
- Llevar a horno precalentado a 180°C por 10-12 minutos. Las tapas deben inflarse y quedar apenas firmes al tacto, pero blanditas.
- Dejar que se enfríen completamente antes de rellenar.
Para la ganache de chocolate:
- Picar el chocolate en trozos pequeños y colocarlo en un bol resistente al calor.
- Calentar la crema de leche hasta casi hervir (sin que burbujee). Volcarla sobre el chocolate y dejar reposar 2-3 minutos.
- Mezclar suavemente con una espátula hasta obtener una crema lisa. Agregar la manteca (opcional) si se quiere más brillo y suavidad.
- Dejar enfriar a temperatura ambiente o en heladera durante unos 30 minutos, hasta lograr una consistencia untable.
Armado:
- Unir las tapas de a dos con una generosa cucharada de ganache en el medio. Presionar ligeramente para que el relleno llegue a los bordes, sin desbordarse.
- Llevar a la heladera durante 20 minutos para que se asienten.
