20 Trucos de los supermercados para que gastes más

Todos sabemos (y repetimos) que los supermercados tienen estudiadísimas las formas de hacernos consumir más y más. Pero… ¿de qué hablamos exactamente? Aquí algunos ejemplos:

 

1. TE HACEN ASOCIAR EL COLOR ROJO CON DESCUENTOS

Es común que en el estacionamiento de un supermercado haya carteles de color rojo con ofertas de descuento. Una vez dentro, el mismo tipo de diseño y señales no siempre indicará una reducción en el precio. Pero debido a la asociación que ya hemos hecho antes de entrar, estaremos más inclinados a comprar el producto.

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-¡Dios mío! ¡Bolsitos de Hello Kitty a mitad de precio!

 

 

2. HACEN QUE LOS CARRITOS SEAN MUY GRANDES

¡El carrito de supermercado es enorme! Muchísimo más grande que la compra semanal de una familia. Esto nos induce a verlo “vacío” y comprar más.

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-Por eso yo, señora, me traigo esta canastita de casa.

 

 

3. PONEN LA FRUTA Y LA VERDURA AL INICIO DEL RECORRIDO

Para el consumidor sería más lógico comprar los productos frescos al final del recorrido y no aplastarlos luego con otros productos. Pero para el súper es más lógica la sensación positiva del color y el aroma a fresco al entrar al establecimiento. Además, está comprobado que si comprás los alimentos saludables al inicio de la compra, más tarde serás más proclive a gastar más en pecocinados.

-Bienvenidos, bienvenidos, este es el inicio del recorrido. Mire que bonito morrón.

 

 

4. TE ENGAÑAN CON CUENTAS DIFÍCILES

Por kilo, por unidad, por paquete, por cuarto, por 100g. Comparar precios en un supermercado es una tarea difícil. Incluso en aquellos supermercados que tienen debajo del precio “oficial” el precio general (ej: paquete de galletas de 138g. que debajo dice el precio por kilo) muchas veces la unidad suele variar. En el super en el que compro, debajo del precio del paquete del papel higiénico, aparece el precio general, en algunas ocasiones por metro, en otras por rollo, en otras por m2 y en otras ¡por cuadradito! Imposible comparar.

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-Justo hoy que no estudié la tabla del ocho.

 

 

5. PRETENDEN QUE LAS FRUTAS Y VERDURAS ACABAN DE LLEGAR DE LA HUERTA

Desde la forma de colocarlas hasta el viejo truco de rociarlas con agua fresca, todo está puesto para dar la sensación de que se trata de un negocio de proximidad.

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-¿Lo ve? Todo esto acaba de llegar de la huerta y esto es un negocio de proximidad.

 

 

6. HACEN QUE TENGAS HAMBRE

Las panaderías suelen estar ubicadas en lugares estratégicos dentro de los supermercados de grandes superficies. El olor del horno y la visión del producto activan tus glándulas salivales y te hacen más propenso a compras compulsivas.

-Todo lo que me pidas a partir de ahora, cariño, te será negado por ser parte de una estrategia vil del supermercado.

 

 

7. TE FUERZAN A CAMINAR MUCHO

Productos básicos como huevos, leche, pan, etc. están dispersos por toda la superficie para que tengas que caminar lo más posible entre uno y otro. Así, quizás la tentación te sorprenda en el camino y acabes llevando productos que no tenías pensado llevar.

-Mamita, ¿por qué llevamos 18 horas aquí? Me duelen las piernitas.
-Mira, traje la tablet.

 

 

8. TE HACEN PENSAR QUE ESTÁS YENDO MUY RÁPIDO CUANDO NO LO ESTÁS

Este es uno de los que más me sorprendió: en los supermercados se colocan baldosas de tamaño pequeño (sobre todo en los pasillos más caros). Esto es porque, el sonido rápido y constante del carro en el suelo te hará pensar que estás yendo más rápido de lo que realmente estás yendo… inconscientemente desacelerarás la marcha y pasarás más tiempo comprando.

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-Mariela, ¡correte que te piso!

 

 

9. ESCONDEN LA LECHE AL FINAL

La parte final del supermercado siempre contendrá productos básicos como láceos, carnes, quesos. Esto es para forzarte a atravesar todo el supermercado cuando busques tus productos del día a día, aumentando así la posibilidad de que selecciones más productos en el camino.

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-Hola señores, esta es la leche y efectivamente está al final.

 

 

10. TIENEN UNA FÓRMULA PARA LA DERECHA E IZQUIERDA

En el recorrido por un supermercado, te harán moverte entre las góndolas de derecha a izquierda, zigzagueando. Pero además, es sabido que somos más propensos a comprar los productos que están del lado derecho… en esta ubicación estarán los productos más caros.

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-Soy rebelde porque el mundo me hizo asíii, porque nadie me ha tratado con amoooor.

 

 

11. EXPLOTAN A TUS HIJOS

Los productos más caros estarán siempre a la altura de la vista (a unos 1,60m. del suelo). De la misma manera, los productos que suelen gustar a los niños estarán a la altura de la vista de los niños. Los productos más baratos se ubicarán en los últimos estantes, que es donde menos mirarás.

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-¿Esta lechita quieres? Pues no la llevamos, solo la quieres porque te la pusieron a tu altura.

 

 

12. TE HACEN PENSAR QUE LOS PRODUCTOS SON BARATOS CUANDO NO LO SON

Cuando estás apurado, es mucho más probable que recojas supuestas “promociones” al final de los pasillos que que consideres las opciones de mejor precio. Los productos más baratos NUNCA estarán ubicados allí.

-Uy que barato, miren chicas, una ganga.

 

 

13. TE SUGIEREN “PARES” DE COMIDA DE FORMA SUBLIMINAL

Alimentos complementarios, como algunos tipos de galletas y queso, pasta y salsas o salchichas y mostaza, estarán ubicados uno junto al otro para alentarte a comprar más de lo que pretendías. Fijate la próxima visita al súper: verás que donde están las pastas, siempre habrá una pequeña sección con queso rallado… aunque los lácteos no estén cerca. Estate seguro de que será un queso de precio medio-alto y no toda la oferta de quesos y precios que encontrarás en la sección de lácteos.

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-Me gusta pararme de forma natural a la hora de comprar.

 

 

14. VENDEN CARNE Y PESCADO CON FONDO BLANCO

El fondo blanco hará que estos productos se vean más frescos.

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-Mira cariño, Paulina tenía razón, ¡fondo blanco!