Bienvenidos a una nueva receta en Paulina Cocina. Hoy vamos a hablar de un alimento tradicional de la gastronomía chilena: el Pan Amasado, un pancito tierno con un ligero sabor a mantequilla que ha sabido conquistar corazones y paladares.
Este delicioso pan casero es perfecto para acompañar un buen desayuno, una comida familiar o para preparar un rico sandwich.
Preparense y pónganse cómodos porque vamos a empezar un viaje por el mundo del pan amasado, explorando su historia, sus características, los secretos para que salga perfecto y, por supuesto, una receta de pancito amasado para hacer en casa.
Tabla de contenidos
Sobre el Pan Amasado
El pan amasado es un tipo de pan artesanal típico de Chile, que se caracteriza por su miga suave y su corteza crujiente. A diferencia del pan industrial, el pan amasado se elabora de manera artesanal, lo que le confiere un sabor y una textura únicos.
- La masa del pan amasado se trabaja a mano y se cocina en horno de barro o de leña, aunque también se puede hornear en un horno convencional.
La masa de este delicioso pan se distingue por su sencillez y autenticidad. Su textura y sabor es similar a las “figacitas” de Argentina. Sus ingredientes son básicos: harina, agua, sal, levadura y, en algunas recetas, un poco de grasa como mantequilla o aceite.
Esta simplicidad en los ingredientes es característica de este pancito y es lo que le permite ese sabor tan particular del pan amasado. Tambien puedo recomendarte otra receta de pan casero muy simple: Receta de Pan Casero para principiantes
¿Quién creó el Pan Amasado? Su Historia
La historia del pancito amasado se remonta a las raíces campesinas de Chile, donde se convirtió en una parte esencial de la dieta diaria. Aunque no se puede atribuir a una sola persona, su origen está profundamente ligado a las costumbres rurales chilenas.
En las zonas rurales, las familias solían preparar su propio pan en hornos de barro, utilizando ingredientes simples y métodos tradicionales transmitidos de generación en generación.
- El pan amasado ha sido un elemento central en la vida de las comunidades chilenas, no solo como alimento, sino también como símbolo de hospitalidad y generosidad. En muchos hogares, el pan amasado se hornea diariamente, y es común ofrecer un trozo de este pan a las visitas como gesto de bienvenida.
Cómo Hacer Pan Amasado con Aceite
Hacer pan amasado con aceite es una variante deliciosa y fácil de la receta tradicional. El aceite le da al pan amasado una textura aún más suave y un sabor ligeramente diferente, pero igualmente delicioso.
- Para prepararlo de esta manera, simplemente se sustituye la mantequilla o la margarina de la receta original por aceite vegetal, como el aceite de oliva o el aceite de girasol.
El proceso es sencillo, primero se mezclan los ingredientes secos, se añade el aceite y luego el agua tibia para formar una masa. La masa se amasa a mano hasta que esté suave y elástica, se deja reposar y luego se forman los panes individuales antes de hornearlos hasta que estén dorados y crujientes por fuera.
Características del Pan Amasado
- Textura única: La miga es suave y esponjosa, mientras que su corteza es ligeramente crujiente, creando un contraste perfecto en cada bocado.
- Sabor equilibrado: Gracias a su elaboración artesanal, el pan amasado tiene un sabor auténtico y natural, sin los aditivos ni conservantes del pan industrial.
- Versatilidad: Es perfecto para acompañar cualquier comida, ya sea con mantequilla y mermelada en el desayuno, o con pebre (pico de gallo) y queso en la once (merienda chilena).
- Aroma delicioso: El olor del pan amasado recién horneado es inconfundible y evoca recuerdos de infancia y hogar.
- Nutritivo: Al ser un pan amasado artesanal puede ser más nutritivo que otros panes procesados, ya que se pueden utilizar ingredientes de alta calidad y sin aditivos artificiales.
Los mejores usos para el Pancito Amasado
El pancito amasado es extremadamente versátil y se puede disfrutar de muchas maneras.
- Desayuno: Con mantequilla y una rica mermelada de damasco o de otra fruta, acompañado de una taza de café o té.
- Once: Con queso fresco y pebre, una combinación clásica chilena.
- Comida: Como acompañamiento de sopas y guisos, absorbiendo todos los sabores del plato principal. Ideal para mojar en la salsa de un buen estofado de carne.
- Picnic: Perfecto para llevar al campo, ideal para hacer sandwiches con fiambres y vegetales frescos.
- Snacks: Simplemente solo, caliente y recién salido del horno, es un deleite de por sí.
Cómo Conservar el Pan Amasado
- Almacenar en un lugar fresco y seco: Mantener el pan amasado en una bolsa de tela o una caja de pan para que respire y no se humedezca.
- Congelar: Cuando se hace mucha cantidad y no se va a consumir en pocos días, lo ideal es congelar el pan amasado. Para descongelarlo, simplemente se lo deja a temperatura ambiente o se lo calienta ligeramente en el horno.
- Evitar el refrigerador: El refrigerador (heladera) puede hacer que el pan amasado se seque más rápido, así que es mejor mantenerlo a temperatura ambiente o congelarlo.
Cómo Lograr un Pan Amasado Fácil
- Usar levadura fresca: Es importante chequear que la levadura esté activa y fresca para un buen levado.
- Controlar la temperatura del agua: El agua debe estar tibia, no caliente, esto es fundamental para activar la levadura sin matarla.
- No omitir el reposo: El reposo es esencial para que la masa adquiera la textura y el tamaño adecuado.
- Amasar bien: Dedicar tiempo al amasado para desarrollar el gluten y obtener una masa elástica.
- Hornear a la temperatura correcta: Precalentar bien el horno para que el pan amasado se cueza de manera uniforme y desarrolle una buena corteza.
Consejos, Tips y Secretos para Hacer Pancito Amasado
- Usar harina de buena calidad: La harina de fuerza es ideal para este tipo de preparación.
- Amasar con energía: El amasado es un proceso que requiere paciencia y dedicación.
- Probar con diferentes grasas: Experimentar con aceite de girasol, aceite de oliva o mantequilla para encontrar el sabor preferido.
- Hornear en horno de barro: Si se tiene acceso a un horno de barro, aprovecharlo. El sabor y la textura del pan amasado serán insuperables.
- Añadir semillas: Para un toque diferente, las semillas de sésamo o girasol le van a aportar textura y sabor al pan amasado.
- Probar con distintas levaduras: Experimentar con levadura seca o fresca para ver cuál da mejor resultado. También se puede hacer la receta con masa madre.
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Receta de pan amasado
Rinde: 12 porciones
Tiempo de preparación: 2 horas
Ingredientes
- 1 kg de harina de trigo
- 20 g de sal
- 20 g de levadura fresca
- 8g de azúcar (una cucharadita)
- 600 ml de agua tibia
- 50 g de mantequilla, margarina o aceite
Cómo hacer pan amasado paso a paso
- En un bol grande, formar un volcán con la harina y la sal. Disolver la levadura fresca en un poco de agua tibia junto con una cucharadita de azúcar y verterla en el centro del volcán de harina.
- Añadir el resto del agua tibia poco a poco, mientras se mezclan los ingredientes con la mano o con un cornet hasta obtener una mezcla homogénea.
- Incorporar la mantequilla, margarina o aceite a la masa y mezclar bien hasta que todos los ingredientes estén completamente integrados.
- Colocar la masa sobre una superficie enharinada y amasar enérgicamente durante unos 10 minutos, hasta que esté suave y elástica.
- Formar una bola con la masa y colocarla en un bol ligeramente enharinado. Cubrir con un paño húmedo y dejar reposar en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora, o hasta que doble su tamaño.
- Después del reposo, dividir la masa en 12 porciones iguales y formar bolitas. Colocarlas en una bandeja de horno ligeramente enharinada o engrasada. Cubrir con un paño y dejar reposar unos 20 minutos.
- Precalentar el horno a 200°C. Antes de hornear, hacer un pequeño corte en la parte superior de cada bola de masa o pinchar con un tenedor para permitir la expansión durante el horneado.
- Hornear los pancitos durante unos 20-25 minutos, o hasta que estén dorados y crujientes por fuera. Retirar del horno y dejar enfriar sobre una rejilla antes de disfrutar.