Si hay algo que sabemos es que cuando hay duraznos en la casa, la cocina se vuelve un lugar más alegre. El aroma, la textura jugosa, ese punto justo entre dulzón y ácido… todo invita a preparar algo rico.
Y ojo, no estamos hablando sólo de postres. Las recetas con duraznos son un verdadero festival de sabores, colores y combinaciones que se pueden aplicar en platos fríos, calientes, dulces, salados y hasta en bebidas. ¿Quién dijo que el durazno es sólo para el almíbar?
La magia de las recetas con duraznos es que pueden ir desde el desayuno hasta el postre, pasando por entradas, guarniciones y hasta platos principales. Porque el durazno no tiene miedo. Se banca el horno, el grill, la licuadora, la ensalada, el vino y hasta la parrilla, si se lo proponen.
Porque sí, señoras y señores, los duraznos no sólo pueden usarse en postres o platos dulces: hay un universo de comidas con duraznos esperando ser descubierto. Y aquí estamos para guiarlos en esta aventura frutal.
En las recetas con duraznos no todo es cortarlos al medio y sacar el carozo (aunque eso también tiene su encanto). Saber cómo cocinar duraznos puede marcar la diferencia.
Y si pensamos ¿con qué combinar duraznos? Lo cierto es que van muy bien con calabaza, cebolla morada y zanahoria. Una bandeja al horno con todo eso, sal, pimienta, aceite de oliva y unos duraznos cortados en gajos grandes, los últimos 10 minutos. El contraste dulce-salado, nos regala un momento de gloria.
Entre otras recetas con duraznos, también se pueden agregar a un salteado de vegetales tipo wok, con un chorrito de salsa teriyaki. Eso acompañado con arroz, fideos asiáticos o solo, es un súper plato que puede cambiar una simple cena por una comida gourmet.
Si buscamos qué cocinar con duraznos, la verdad es que se pueden utilizar en un montón de comidas, y no sólo estamos hablando de dulces, como la tarta de durazno, o los clásicos duraznos en almíbar También hay muchas recetas con duraznos para la hora de la comida e incluso para el momento de los cócteles, como en el clericot.
Nada dice “mañana feliz” como un café con leche y una tostada con mermelada de durazno casera. Y ni hablar si nos preparamos un desayuno continental en casa, como el de los mejores hoteles.
Atención acá, porque también: los platos con duraznos, que se pueden incluir en salsas para carnes, en ensaladas y en platos frescos como el ceviche de mero con el toque de durazno que le aporta el toque dulce y tierno.
Si ya se entusiasmaron con estas ideas y quieren más, pueden explorar todas mis recetas con duraznos disponibles en el blog. Hay opciones para todos los gustos: dulces, saladas, fáciles, gourmet, para el mate o para la cena del domingo.