Estimados amigos y amigas de Paulina Cocina, hoy vinimos a sorprenderlos con una receta que parece de un lugar pero es de otro y hasta quizás ustedes lo conozcan con otro nombre. Spoiler: ¡El flan napolitano no es de Nápoles! Pero sigan leyendo porque es muy interesante el por qué y el cómo. Además como siempre al final van a encontrar la mejor y más fácil receta del mundo.
El flan napolitano es un postre icónico en la gastronomía mexicana que combina influencias europeas con ingredientes locales para crear una deliciosa y suave obra maestra culinaria.
Este postre es conocido por su textura cremosa y su sabor a caramelo, y su popularidad ha trascendido fronteras, convirtiéndose en una opción favorita en muchas partes del mundo.
El nombre sugiere una conexión con la ciudad italiana de Nápoles, pero la receta tal como la conocemos hoy en día tiene sus raíces en México. Su origen se remonta al período colonial, cuando los españoles introdujeron el flan en México y, con el tiempo, los mexicanos le dieron su toque único.
La característica distintiva del flan napolitano es su capa de caramelo líquido que se convierte en una salsa dulce y pegajosa cuando se vierte sobre el flan invertido antes de servirlo.
La receta básica del flan napolitano incluye ingredientes simples pero esenciales como huevos, leche condensada y leche evaporada, azúcar y vainilla.
El flan napolitano se sirve típicamente en rebanadas individuales, acompañado de una porción de caramelo que se derrama sobre la parte superior, creando una presentación atractiva y apetitosa. Su sabor dulce y suave lo hace ideal para rematar una comida tradicional mexicana o para disfrutarlo como postre en cualquier ocasión especial.
Su nombre puede llevar a la confusión debido a su referencia a Nápoles, una ciudad italiana. Sin embargo, este postre no tiene su origen en Italia, sino en México, y su nombre se atribuye más a una cuestión de marketing y aprecio por la cocina europea que a sus verdaderos orígenes.
Durante el período colonial, los españoles introdujeron en México el flan clásico, un postre de origen europeo, y se empezó a fusionar con ingredientes y técnicas locales para crear una versión única.
La razón detrás del término “napolitano” se debe a que, en ese momento, Nápoles era considerada un símbolo de refinamiento culinario en Europa. Al llamarlo “napolitano”, se buscaba darle un toque de elegancia y sofisticación al postre, lo que lo hacía más atractivo para las clases aristocráticas y la sociedad mexicana de la época.
Decorar un flan napolitano es una oportunidad para añadir un toque de elegancia visual a este postre. La forma más común de decoración es verter un poco de caramelo líquido para flan y postres sobre la superficie antes de servirlo. Esto no solo realza el sabor del postre, sino que también crea un aspecto atractivo y brillante.
Además, se puede agregar una hoja de menta fresca o una fresa en la parte superior para dar un toque de color y frescura. Algunos amantes del flan también optan por espolvorear un poco de canela o nuez moscada molida para añadir un matiz de sabor adicional.
La receta de flan napolitano ha experimentado diversas variaciones a lo largo de los años, con ingredientes adicionales como café, chocolate o frutas que se incorporan para darle un giro creativo. Es usual también ponerle encima un copo de crema chantilly que no sólo le dará belleza visual sino que realzará la cremosidad al postre.
Seguime en Instagram (acá)
Y en YouTube que subo vídeos nuevos todas las semanas (clic acá)
Rinde: 8 porciones
Tiempo de preparación: 1 hora
Para el flan:
Para el caramelo: